Gigantes de Benidorm - Torre Lugano y hotel Bali

Si hay algo que destaca en el pueblecito costero de Benidorm respecto de todos los demás destinos turísticos de sol y playa de la costa española, son los rascacielos.
En ningún otro lugar (ni siquiera en grandes capitales como Madrid o Barcelona), se permite semejante aprovechamiento urbanístico. En un terreno que apenas tiene superficie suficiente para construir media docena de chalets, de la noche a la mañana se levanta un coloso de cuarenta plantas con doscientos apartamentos. A los promotores inmobiliarios que tanto proliferaron en este país en nuestro pasado más reciente, se les hubiera hecho la boca agua si los planes urbanísticos de sus zonas de influencia hubieran permitido ese ratio de edificabilidad. Por muy caro que fuese el solar, con ese nivel de ocupación los beneficios tienen que ser tremendos.
La única pega es que un proyecto de estas dimensiones tiene un coste mucho mayor, el estudio, las medidas de seguridad, etc encarecen el coste de construcción..... o no.
Como ejemplo, al parecer el que hasta ahora ocupa la segunda posición (por detrás del todopoderoso Bali) en altura, la torre lugano, está construida con, digamos, "poco cariño". Según cuentan sus propietarios, aparte de las dudosas calidades de sus apartamentos de lujo, por los que dicen haber pagado hasta 600000 euros, los defectos de construcción son múltiples, tantos como para echarse a temblar y pensárselo dos veces antes de habitarlos...

A mi me encantan los rascacielos, pero creo que la gente demuestra un poco de irresponsabilidad, o haber visto pocas películas, a la hora de habitar en uno de esos monstruos de acero y cemento.
Podemos recordar a Paul Newman corriendo escaleras arriba y abajo en su coloso en llamas, o pensar en el terrible final de las gemelas torres del world trade center de Nueva York, o simplemente leer las declaraciones de cualquier responsable de protección contra incendios de cualquier ciudad, grande o pequeña, en las que aseguran que no disponen de medios técnicos para acometer en caso de incendio un rescate en esas alturas.
Como en tantas ocasiones, el azar parece que juega a favor de los osados, y apenas si ocurren desgracias en estos edificios, pero no dejan de ser ratoneras con un riesgo inherente muy elevado.
Y todo por un puro afán de especulación urbanistica (a las espaldas de benidorm existe un inmenso secarral con hectáreas de terreno suficientes como para alojar la misma población en edificios de dos alturas). Eso si, no todas estarían a cinco minutos de la playa.....

Os dejo con una fotuca del Bali. Hasta ahora tiene el record de altura (186 metros en 50 plantas).
El segundo en el ranking del skyline de Benidorm es la torre Lugano con 150 metros y 43 plantas.
El año próximo ambos se verán superados por las torres gemelas del edificio In Tempo, que con sus 200 metros y 52 plantas se convertirá en el edificio más alto de Benidorm. ¿hasta cuando conservará el record?...

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