¿Y qué es eso del volao, bolao o como se diga, entre Cóbreces y Toñanes, en Cantabria.?
Pues un paraje singular, que hasta hace poco era desconocido para el turismo y para muchos montañeses.
Abandonado, olvidado e ignorado por parte del gobierno regional cántabro, y del ayuntamiento de Alfoz de Lloredo, al que pertenece, cada día aumenta el número de visitantes que se acercan a este lugar, guiados por páginas web como ésta, y atraídos por las fotografías que de ese lugar se muestran en la red.
¿Una cascada que se precipita en el mar?. Eso hay que verlo.
Cada día recibo varias visitas en mi blog de internautas que buscan los términos "cascada del bolao" o similar.
Realmente no he logrado saber cuál es el término correcto para referirse a este pintoresco rincón de la costa cantábrica. He visto mayor número de referencias a Bolao, pero al tratarse de un abrupto acantilado, me inclino a pensar en el significado de la palabra "volado", vuelo, etc.
En cualquier caso, con esta panorámica te puedes hacer una idea clara de lo que vas a encontrar. Un acantilado de paredes rectas, batido por las olas del Mar Cantábrico, y saltando caprichosamente, un pequeño riachuelo que cae en varios saltos hasta alcanzar el mar.
Las ruinas de un viejo molino completan la escena.
Desde que lo descubrí hace un par de años, y gracias a la cercanía de mi domicilio, es un lugar que visito a menudo y he fotografiado de todas las maneras posibles; de día, de noche, con cielo nublado, despejado, al amanecer, al atardecer, con luz artificial, etc.
En un mismo lugar se dan cita dos de mis más atractivos motivos fotográficos: marinas y cascadas.
Y esta mañana volví una vez más para intentar mejorar una fotografía de la cascada que hice hace tiempo con mi anterior cámara Canon EOS 350D y que me han encargado para su impresión en gran formato.
Esta vez utilicé mi Canon EOS50D, con mayor resolución, con el mismo objetivo gran angular Tokina 12-24mm f4, y provisto además de mi reciente filtro de densidad neutra variable LCW Fader ND2-400.
Estrené unas botas de agua que me regaló mi hermano, y durante un par de horas pude explorar nuevos encuadres y técnicas aprendidas últimamente.
No se si he conseguido superar mis anteriores acercamientos al lugar, pero me gustan los resultados.
En primer lugar os muestro una panorámica de espaldas al mar, en la que se puede apreciar la cascada, el molino y el acantilado, con las piedras cubiertas por las verdes algas en primer plano. Y para que se pueda apreciar con detalle, os invito a verla en su máximo tamaño (4817x2692 pixels)
Mirando al mar, aproveché para hacer una prueba que tenía pendiente desde hace un tiempo: nada menos que una exposición de 15 segundos a plena luz del día, usando el fader nd400 sobre un nd8, cerrando a f22. Este es el resultado (no cuidé mucho la composición, pero se aprecia el perfil del rostro del indio en el borde del acantilado).
Si nos vamos acercando a la cascada y el viejo molino, vemos un remanso del rio que refleja como un espejo, y al fondo la bonita cascada. Este encuadre ya le he repetido más veces, pero no me canso. Además, hoy he conseguido un cielo aceptable, nada quemado.
La cascada está llena de detallucos que merecen la pena verse de cerca, con detalle.
Y por fin la fotografía que me habían pedido:
Además del mayor tamaño y resolución, creo que esta versión tiene más detalle y mejor encuadre que la anterior.
Bueno, espero haber despertado tu curiosidad, y que te animes a visitar este rincón secreto. Eso si, te pido por favor que si lo visitas, respetes el entorno, sin tirar basuras, ni romper nada, ni dañar a los animales y plantas, dejando el lugar tal como lo encuentres.
Y si ves por allí a un fotógrafo con su trípode, quien sabe, igual soy yo de nuevo!!!
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