Otro día de lluvia persistente en el Cantábrico, sin salir de casa. Tiempo para escuchar buena música, jugar con las niñas, y practicar la disciplina del bodegón, pintando con luz.
Estoy muy contento con el resultado de este trabajo. He estudiado últimamente a varios maestros haciendo un duro trabajo de "ingeniería inversa", escudriñando sus fotografías y lo poquito que cuentan en la red, e incluso me he fabricado una nueva herramienta para pintar, y lo cierto es que las texturas, el colorido y la cantidad de detalle alcanzada me encanta. La composición no es mi fuerte, y no estoy satisfecho con ella, pero en general creo que se aprecia un avance en el manejo de la luz de mis bodegones.
Como ya me están preguntando, estos son los datos: 50mm, f8, iso200, 68 tomas de 4", balance de blancos, contraste y saturación en LR, capas en PS, contraste, dodge&burn, enfoque y listo.
Unas tres horas entretenido.
Bueno, y la compañía de Jimi Hendrix.
Quiero también agradecer a mi compañero Victor Gatóo por conseguirme la tela de saco, que hoy día es difícil de encontrar. Me encanta la textura, y le va genial a los bodegones. Gracias Victor, ya ves que he comenzado a usarla, y más que vendrán....
Aquí puedes ver un recorte al 100% para apreciar bien la suavidad de la luz, el tremendo detalle en las texturas, y la nitidez del conjunto.
Y por último la imagen testimonial, para que sea evidente el trabajo de iluminación, y cómo cambia la escena con una simple linternuca de los chinos.
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