Ya os decía ayer que si San Carlo alle quattro fontane era espectacular, su iglesia vecina no tenía nada que envidiar.
San Andrea al Quirinale, a unos 500 metros de la anterior, rivaliza en diseño innovador, planta original, y esta última aún saca ventaja en tamaño, con mayor altura y amplitud del templo entre columnas.
En este caso, el artista responsable de esta iglesia no es otro que el genial Gianlorenzo Bernini, rival de Borromini y que en esta calle dejó notable huella de su arte compitiendo por hacerse con el título de arquitecto número uno del Barroco italiano bajo la protección del reinado de los papas. San Andrea fué construido años más tarde que San Carlo, de modo que Bernini tuvo toda la ventaja para competir y ganar a Borromini, incluso tal vez imitar la planta elíptica de la obra de Borromini.
En cualquier caso, pasear por la Via del Quirinal y visitar estas dos fantásticas iglesias es una gozada. Y lo mejor de todo, puedes disfrutar de la visita en completo silencio y con escasísimos, educados y respetuosos turistas amantes del arte.
Quiero dar las gracias a los tour operadores por no incluir estos templos en sus itinerarios.
Y el techo, ese techo que no falte:
Por último, una visita virtual como las que pongo últimamente, para aquellos que pillaron el viaje organizado "veintisiete ciudades italianas en tres dias", o aquellos del "crucero por todos los paises del Mediterráneo en un fin de semana", y a los que posiblemente no les llevaron a ver esta iglesia.
Sant' Andrea al Quirinale, Rome, Italy in Rome
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